El domingo 16 de enero la parroquia Santa Elena fue testigo de su primera misa en español. El acto fue calificado por el padre Claudio Díaz Jr. de “histórico”. “En Sta. Elena nunca ha habido una misa en español” explicó el padre Claudio, quien ofició la misa. “Todo lo que se daba era inglés o polaco. Sta. Elena era y es uno de los bastiones de la comunidad polaca.” La misa en español en Santa Elena surge a raíz del cierre de la parroquia San Marcos, con una feligresía fuertemente hispana, y su integración con Sta. Elena, como parte del programa Renueva mi Iglesia. En conversación con Alejandro Castillo, director de comunicaciones para la comunidad hispana de la arquidiócesis, en el programa semanal Chicago Católico, el padre Claudio dijo que él no quería perder a la feligresía de San Marcos. “Muchos tomaron ciertas decisiones” dijo el padre Claudio. “Por ejemplo, varios de los que conducían dijeron ‘bueno, pues yo me quedo en una iglesia que me quede cerca de mi casa’. En ese caso, no los perdimos, no hay problema. Pero había un gran grupo que todavía vive en el vecindario, que querían ir como grupo a un lugar. Entonces les presenté la opción ‘bueno, Sta. Elena les queda cerca, se pueden ir caminando’. Entonces dije, ‘pues vamos a hacer una misa en español en Santa Elena’”. Ubicada en Ukranian Village, la parroquia Sta. Elena tiene la cercanía de los vecindarios de Bucktown y de Humboldt Park, con una fuerte presencia puertorriqueña. Dado que tradicionalmente, Sta. Elena ha sido una parroquia de la comunidad polaca, la arquidiócesis había decidido consolidar las misas y el ministerio polaco solo en determinadas parroquias, por lo que Santa Elena habría perdido a su comunidad polaca. “Eso me preocupaba” dijo el padre Claudio, “porque yo decía ‘ellos están felices aquí, los polacos conforman el número mayor de personas en las misas’. Yo no veía ningún problema con tener un ministerio multicultural, diverso. Para mí eso nunca ha sido un problema. El liderazgo estaba de acuerdo. Entonces yo le pedía al señor obispo ‘déjelos, por favor, permítame trabajar con ellos. Vamos a darnos un año. Si quizás ellos sienten que en otra parroquia pueden manifestar y desarrollar su cultura, su idioma, la forma en que ellos ven la iglesia, pues adelante. Pero no les quiten a ellos esa oportunidad, y no me quiten a mí esa oportunidad de tenerlos’. Entonces se quedaron. Ellos muy lindos, muy agradecidos”. “Luego yo dije ‘tengo otros hijos, que son los de San Marcos’” continuó el padre Claudio. “Entonces abro la misa y se vuelve histórico al añadir presencia hispana al convertir Santa Elena en una realidad multicultural. ¡Eso implica que ciertas liturgias van a ser trilingües!” “De hecho, el día antes de la misa yo llamé a una reunión con todos los líderes litúrgicos” comentó el padre Claudio. “Y estuvieron todos, anglos, polacos e hispanos. Fue una experiencia de unidad, de tratar de entendernos”. “Dios abre corazones” continuó el padre Claudio, “predispone el corazón a estar abiertos al cambio, a la transición y a la evolución, porque el que no evoluciona se estanca. Se trata de tener un liderazgo tanto por parte del pueblo como por parte del sacerdote. Un liderazgo que pueda ejercitar esa teología de acompañamiento, esto lo estamos haciendo juntos. Castillo le preguntó cuál era el ánimo de los feligreses. “Al principio entraron con expectativa” respondió el padre Claudio. “No con miedo, porque varios de ellos se sintieron acompañados. Y esa es la clave para estos movimientos. Tú tienes que acompañar al pueblo. Fue un ambiente de fiesta, de celebración, de nuevo comienzo, de pasar la página, de entender de dónde venimos, que fue doloroso, a entender a donde queremos ir, que es esperanzador y luminoso”. La misa en español será semanal, todos los domingos a las 12:30 p.m. en Sta. Elena, en 2315 W. Augusta Blvd., Chicago.