El apoyo a las becas de crédito tributario crece con los donantes y los padres

Las donaciones para las becas de crédito tributario para las escuelas católicas arquidiocesanas han aumentado alrededor del 20 por ciento con respecto al mismo período del año pasado, según funcionarios arquidiocesanos.

El incremento se debe probablemente a que más personas saben del programa, conocido como Invest in Kids, que permite a los contribuyentes de Illinois hacer una donación a una organización que otorga becas y luego quitar 75% de esa donación de su factura del impuesto sobre la renta estatal; y las personas están al tanto del trabajo que las escuelas católicas han hecho para proveer una educación segura en persona durante la pandemia de COVID-19, dijeron funcionarios arquidiocesanos.

Las donaciones pueden ser dirigidas a grupos específicos de escuelas, como las escuelas católicas en la Arquidiócesis de Chicago, o escuelas individuales. La mayoría de las donaciones para las escuelas católicas de la arquidiócesis están dirigidas a escuelas individuales, dijo Clare Sullivan, directora de becas para la Oficina de Escuelas Católicas de la arquidiócesis.

Aproximadamente 2,970 estudiantes de escuelas católicas en la Arquidiócesis de Chicago recibieron becas con un promedio de $5,965 para este año escolar, mencionó Sullivan. Eso incluye 138 escuelas arquidiocesanas, junto con escuelas católicas independientes y aquellas operadas por comunidades religiosas.

Las becas pueden ser completas o parciales, dependiendo del ingreso familiar. Para recibir una beca completa, una familia de cuatro personas no puede tener un ingreso de más de $48,500. La mayoría de los beneficiarios reciben becas completas.

Robin McAfee, directora interina de la escuela St. Anastasia en Waukegan, dijo que su escuela depende de los exalumnos, padres, y otros miembros de la familia para correr la voz, porque hacer que los niños ingresen en su escuela y mantenerlos allí termina beneficiando a toda la comunidad.

“Las donaciones son cruciales para nuestra supervivencia, y nuestra supervivencia es crucial para la comunidad”, dijo McAfee, señalando que St. Anastasia también participa en una serie de programas de becas privados y arquidiocesanos para hacer posible que las familias puedan inscribir a sus hijos. “Nuestros niños continúan para graduarse de la escuela secundaria y van a la universidad, y para muchos de ellos, son los primeros en sus familias en hacer eso. Luego regresan a la comunidad”.

De los 199 estudiantes en St. Anastasia, 39 han recibido becas de crédito tributario a través de Empower Illinois, una de las organizaciones que otorga becas con las que la arquidiócesis trabaja. Pero 106 estudiantes solicitaron becas a St. Anastasia y no las recibieron porque no había suficiente dinero disponible, señaló Sullivan.

La escuela tiene una capacidad de 244 estudiantes y le encantaría acomodar a más, dijo McAfee.

En la escuela St. Nicholas of Tolentine, en 3741 W. 62nd St., cerca de 70 de los 420 alumnos han recibido becas de crédito tributario, bien sea de Empower Illinois o de Big Shoulders Fund, la otra organización que otorga becas con la cual las escuelas arquidiocesanas trabajan, y muchos estudiantes reciben otras becas o formas de ayuda financiera, dijo Mariagnes Menden, la directora de la escuela.

“Las becas de crédito tributario, han sido una bendición para nosotros”, dijo Menden. “Ha sido una oportunidad para aumentar nuestras inscripciones. Ese estudiante que llega a nuestro edificio, y nunca ha estado aquí antes, ellos se están convirtiendo en parte de la familia escolar de St. Nick’s. Ellos le están diciendo a otros: sus amigos, sus familiares, sus vecinos, todo sobre St. Nick’s. Ese ‘de boca en boca’ podría convertirse en otra familia de St. Nick’s. Es realmente una situación en la que todos ganan”.

Las familias y los miembros de la junta de St. Nicholas trabajan para comunicar la historia de la escuela y animar a las personas a donar para las becas de crédito tributario, dijo Menden, incluyendo ayudarlos a través del proceso, que tiene varios pasos. También ofrecen ayuda a las familias que quieran hacer la solicitud.

“Les decimos: ‘si no la obtienen este año, intenten nuevamente el próximo año’”, mencionó Menden. “Vamos a hacer todo lo posible para mantener a esa familia aquí. Y si son nuevos en la escuela, el hecho de que hicieron la solicitud abrió la puerta para una conversación adicional con esa familia”.

Menden y McAfee dijeron que las familias que han llegado a sus escuelas con becas de crédito tributario se han convertido en valiosos miembros de sus comunidades escolares, con padres que sirven como entrenadores voluntarios, líderes scouts y en otros roles.

Los defensores esperan que el creciente apoyo haga más probable que el programa se vuelva permanente. Cuando fue creado por primera vez en 2017, se suponía que el programa duraría cinco años, terminando en 2022. La primavera pasada, el gobernador de Illinois Jay Pritzker propuso recortar su crédito tributario de 75% a 40%, lo que significa que los donantes solo obtendrían que se quitaran de sus impuestos 40 centavos por cada dólar que donaron.

Los legisladores estatales conservaron el crédito en 75% y extendieron el programa un año adicional.

Brendan Keating, director de desarrollo de la Arquidiócesis de Chicago, dijo que el solo tener el programa en su cuarto año ha hecho que las personas tengan más conocimiento de él, al igual que la cobertura de las escuelas católicas brindando educación en persona a lo largo del año escolar 2020-2021.

“Yo creo que los donantes han estado observando lo que ha estado sucediendo con las escuelas”, dijo Keating. “Ellos están muy impresionados con el compromiso de las escuelas católicas a proveer educación segura, llena de fe, en persona. Hemos tenido mucha comunicación sobre las cosas grandiosas que están sucediendo en nuestras escuelas”.

Este año, Empower Illinois recibió $9.5 millones en efectivo y compromisos designados para las escuelas católicas arquidiocesanas entre el 1 de diciembre de 2021, y el 6 de enero, señaló Keating, con la donación alrededor de un 20% superior al año pasado. En el año entero del 1 de diciembre de 2020 al 30 de noviembre de 2021, Empower recibió $11.8 millones designados para las escuelas católicas arquidiocesanas. Eso no cuenta a las escuelas católicas independientes o aquellas operadas por las comunidades religiosas.

Parte de eso puede ser atribuido a un programa complementario (matching program) que la arquidiócesis ha llevado a cabo durante los últimos tres años, alineando a los principales donantes para que den el doble de la cantidad de cualquier donación a las becas para las escuelas católicas arquidiocesanas a partir del 1 de diciembre y continuar hasta que se agote el dinero. Este año, ocho donantes principales proporcionaron $5.2 millones en fondos complementarios.

“Las escuelas estaban listas para eso”, dijo Keating. “Ellas tenían a las personas en fila y listas para donar el 1 de diciembre”.

La razón es simple: Las donaciones son aceptadas todo el año, pero aquellas hechas en el invierno y comienzos de la primavera permiten a las escuelas aceptar a alumnos para el siguiente año sabiendo con seguridad que tendrán una beca.

“Ahora es el momento para hacerlo”, dijo Keating.

El programa complementario, el cual Keating espera repetir en diciembre de 2022, hace que los dólares rindan aún más. Bajo Invest in Kids, los donantes que dan $1,000 para las becas recibirán de regreso $750 cuando paguen sus impuestos, lo que significa que solo $250 sale de su bolsillo. Si esos $1,000 son parte del programa complementario, las escuelas que han designado recibirán $3,000 en fondos de becas.

“Estas donaciones realmente ayudan mucho”, señaló.

La arquidiócesis opera una línea de ayuda para las personas que quieran donar pero necesitan orientación para completar el procedimiento. Para obtener información, llame al 312-534-2617 o envíe un correo electrónico a [email protected].