Queridos líderes, ¿alguna vez se han preguntado qué pasaría si desapareciera el Instituto de Liderazgo Pastoral? Si desapareciera nuestro instituto, posiblemente muchas personas no lo notarían, pero algunas, como la señora Alina García Escobar, lamentarían el hecho porque se perdería una institución que forma parte de su propia historia y porque se perderían las posibilidades de formación pastoral para muchos líderes de nuestra iglesia en Chicago. Lo anterior se deduce de algunas de sus afirmaciones, en las que confirma su admiración y amor por lo recibido. “Decidí empezar el Programa de Liderazgo Pastoral porque quería servir a la comunidad hispana de una manera más preparada” dijo ella. “Como catequista de RICA creo que es necesario poder apoyar de una manera integral. Las personas que forman parte de la Iglesia y que están dentro de la comunidad buscan a Dios tanto en la forma religiosa como en la cotidianeidad de sus vidas. Tienen muchas preguntas y necesitan respuestas, así que eso es lo que me motivó a prepararme más. Dentro del Instituto he encontrado no solamente respuestas para las personas a las que sirvo, sino para mi propia vida”. A lo largo de su historia, el Instituto de Liderazgo Pastoral ha tenido muy en cuenta en sus programas una formación integral para sus estudiantes, partiendo de la situación individual, en busca del progreso humano-espiritual de cada uno de ellos. De este modo, los estudiantes pueden abordar los desafíos que demanda la comunidad donde realizan su vida ministerial. De esto siguió dando testimonio la señora Alina cuando afirmó: “Llegué a este programa en un momento terrible de mi vida. Creo que de alguna manera fue providencial que estuviera allí. Las clases me han dado mucha luz y guía. Los maestros me han parecido muy preparados, no sólo en sus materias, sino espiritualmente. También, los retiros y los talleres han aportado mucho para el desarrollo de mi ministerio y mi vida personal. Mis compañeros han impactado positivamente mi vida personal y mi ministerio porque han compartido sus experiencias de vida y su encuentro personal con el Señor”. Sin duda, la señora Alina tiene certeza de la cualidad formativa de nuestro Instituto y desea que otros accedan a esta fuente de formación en la arquidiócesis de Chicago. “Yo recomiendo ampliamente los programas que ofrece el Instituto de Liderazgo Pastoral” sostiene, “a todas las personas que están sirviendo en algún ministerio pues se verán muy enriquecidas en todos aspectos y podrán servir de una manera más entendida a Dios dándonos a nuestros hermanos”. Y, entonces, ¿qué podríamos hacer para que no desaparezca el Instituto de Liderazgo Pastoral? Entre todos podemos evitar su desaparición, aportando cada quien, de acuerdo a las propias posibilidades. Algunos, podrán compartir ideas; otros podrán recomendar nuestros programas, hacer voluntariado, asistir a las citas de formación continua, hacer una donación monetaria, etc. Queridos egresados del ILP, la siguiente oportunidad, para conocer más sobre estas iniciativas y las que ustedes pudieran tener, será en nuestro evento “Reencontrándonos para rejuvenecer nuestros sueños: ¡Reaviva el don de Dios que está en ti!”, guiado por el padre Guillermo Campuzano, el 11 de marzo del 2017, en la parroquia San Viator, ubicada en el 4170 W. Addison Street, Chicago, IL 60641. Para confirmar su presencia o para hacer preguntas, por favor, utilicen el siguiente enlace: http://www.institutodeliderazgopastoral.org/eventos