Internacional

Mensaje del papa Francisco para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado: “Dios camina con su pueblo”

Por Redacción Católico
jueves, agosto 29, 2024

Sebastian Miguel, de seis años, sonríe después de recibir una bendición del obispo auxiliar John Manz (q.e.p.d) después de misa con trabajadores de descendentes guatemaltecos en Boaz, Alabama en octubre de 2013. Foto: Karen Callaway/Católico

Con el tema “Dios camina con su pueblo”, el papa Francisco dará su mensaje en Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado (WDMR, por sus siglas en inglés) que se llevará a cabo el domingo, 29 de septiembre de 2024.

El mensaje de Su Santidad buscará recordarnos que todos somos migrantes en la tierra, que caminamos hacia nuestra “verdadera patria” que es el Reino de los Cielos. En el mundo de hoy, son los migrantes quienes ejemplifican la imagen de pueblo en camino.

“Análogamente” continúa el papa, “es posible ver en los emigrantes de nuestro tiempo, como en los de todas las épocas, una imagen viva del pueblo de Dios en camino hacia la patria eterna. Sus viajes de esperanza nos recuerdan que «nosotros somos ciudadanos del cielo, y esperamos ardientemente que venga de allí como Salvador el Señor Jesucristo» (Flp 3,20).

“Las dos imágenes ―la del éxodo bíblico y la de los migrantes― guardan ciertas similitudes” dice el mensaje del papa. “Al igual que el pueblo de Israel en tiempos de Moisés, los migrantes huyen a menudo de situaciones de opresión y abusos, de inseguridad y discriminación, de falta de proyectos de desarrollo. Y así como los hebreos en el desierto, también los emigrantes encuentran muchos obstáculos en su camino: son probados por la sed y el hambre; se agotan por el trabajo y la enfermedad; se ven tentados por la desesperación”.

El papa Francisco añade que “la realidad fundamental del éxodo, de cada éxodo, es que Dios precede y acompaña el caminar de su pueblo y de todos sus hijos en cualquier tiempo y lugar. La presencia de Dios en medio del pueblo es una certeza de la historia de la salvación: ‘el Señor, tu Dios, te acompaña, y él no te abandonará ni te dejará desamparado’” (Dt 31,6).

“Muchos emigrantes experimentan a Dios como compañero de viaje, guía y ancla de salvación” dice el Santo Padre. “Se encomiendan a Él antes de partir y a Él acuden en situaciones de necesidad. En Él buscan consuelo en los momentos de desesperación. Gracias a Él, hay buenos samaritanos en el camino. A Él, en la oración, confían sus esperanzas. Imaginemos cuántas biblias, evangelios, libros de oraciones y rosarios acompañan a los emigrantes en sus viajes a través de desiertos, ríos y mares, y de las fronteras de todos los continentes”.

Su Santidad dice en su mensaje que el encuentro con el migrante, como con cada hermano y hermana necesitados, es también un encuentro con Cristo, y cita una de sus homilías de febrero de 2019 donde dice “Es Él quien llama a nuestra puerta hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo y encarcelado, pidiendo que lo encontremos y ayudemos”

“Dios no sólo camina con su pueblo, sino también en su pueblo, en el sentido de que se identifica con los hombres y las mujeres en su caminar por la historia ―especialmente con los últimos, los pobres, los marginados―, como prolongación del misterio de la Encarnación”.

“Queridos hermanos y hermanas, en esta Jornada dedicada a los migrantes y refugiados, unámonos en oración por todos aquellos que han tenido que abandonar su tierra en busca de condiciones de vida dignas” escribe el papa y nos invita a sentirnos en camino junto con los migrantes, a hacer juntos “sínodo”.

 

Advertising