Estados Unidos

Obispos y jóvenes comparten mesa y dialogan en el Encuentro

Por James Ramos (Catholic News Service)
miércoles, octubre 3, 2018

El cardenal Blase J. Cupich de Chicago preside la oración de la mañana el 22 de septiembre durante el V Encuentro, en Grapevine, Texas. Foto: Tyler Orsburn/CNS

GRAPEVINE, Texas (CNS) -- Cuando la hermana Lucero Espitia miró alrededor del salón de actividades vio a personas que se parecían a ella.

Aunque la hermana de las Discípulas de Jesús de Aguascalientes, México, no vio a muchas otras religiosas consagradas vestidas de hábito como ella, sí vio unos 750 adultos jóvenes como ella animados mientras se sentaban para cenar con unos 150 obispos que asistieron al quinto Encuentro Nacional en Grapevine.

Compartiendo su perspectiva como hermana religiosa, ella dijo que se sentía animada y feliz al ver los obispos reuniéndose con los jóvenes. “Se tiene que tomar en cuenta a los jóvenes” dijo. “Ellos tienen ideas muy importantes, ideas muy brillantes. Sus preocupaciones son buenas; uno tiene que guiarlos, pero son buenos”.

El nuncio papal en Estados Unidos, el arzobispo Christophe Pierre, se sentó con el cardenal Daniel N. DiNardo de Galveston-Houston, el presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, y con el arzobispo José Gómez de Los Ángeles, vicepresidente de la USCCB, durante el evento especial en el cual se presentó un grupo de discusión sobre la iglesia hispana y los adultos jóvenes latinos.

El obispo Jaime Soto de Sacramento, California, el obispo Alberto Rojas de Chicago, el obispo Edward J. Burns de Dallas y varios adultos jóvenes de todo el país que están involucrados en la pastoral universitaria y de adultos jóvenes formaron el grupo de discusión.

El obispo Michael G. Duca de Baton Rouge, Luisiana, dijo que los jóvenes que se sentaron en su mesa eran honestos y estaban llenos de esperanza.

El reconoció algo incómodo al principio de la conversación lo que también se discutió en el grupo: que muchos jóvenes católicos conocen a sus obispos solamente cuando son confirmados. Aún así, la conversación en su momento fluyó libremente en todas las mesas, las cuales obispos visitaron y compartieron en el diálogo.

Algunos preguntaron cómo se escoge a un obispo o cómo se escogen los párrocos, mientras que otros hablaron del tema de la crisis de abuso sexual y preguntaron a los obispos cómo están manejando esos problemas.

El obispo Duca encontró “preocupaciones y necesidades y deseos y esperanzas sorprendentemente similares” a pesar de las distancias geográficas emtre los jóvenes.

 “Como obispo uno no puede estar en contacto con los jóvenes muy a menudo”, dijo. “(El) puesto lo mueve a uno en cierta dirección. Así que este fue un momento para realmente sentarme con los jóvenes que están en la iglesia”.

Gabriela Karaszewski, quien estaba sentada al lado del cardenal DiNardo, dijo que se sentía “energizada” por la reunión con los jóvenes. En su mesa los jóvenes compartieron con el cardenal sus realidades. Uno de ellos eran un joven que está en Estados Unidos sin documentos y le expresó su gratitud al cardenal por sus esfuerzos para apoyar a los “Dreamers”, jóvenes que participan en el programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia.

Karaszewski, directora de la Oficina de Jóvenes Adultos y Pastoral Universitaria de la arquidiócesis de Galveston-Houston, dijo que “este momento con los obispos y los jóvenes es el momento más emocionante de todo el fin de semana. Creo que los obispos valoran el tiempo que estuvieron escuchándolos”.