A través de nuestra larga historia, Caridades Católicas ha trabajado con parroquias de la Arquidiócesis en nuestra misión compartida de servir y acompañar a los más vulnerables, a los que están sufriendo y a los que frecuentemente son ignorados. De hecho, se podría decir que Caridades Católicas nació en las parroquias, cuando, durante la pandemia de la llamada gripe española, el cardenal Mundelein vio a las parroquias individuales desbordadas por las peticiones de ayuda y desarrolló a Caridades Católicas como una forma de unificar los esfuerzos para aliviar el sufrimiento. Más de cien años después, estas asociaciones parroquiales han sido esenciales durante la pandemia COVID-19. Las enormes necesidades que han surgido desde marzo pasado exigían nuestra respuesta compartida como pueblo lleno de fe. Debido a que los lazos comunitarios entre las parroquias y Caridades Católicas están cuidadosamente unidos, pudimos dar un giro rápido a los métodos habituales de prestación de servicios y establecer despensas de comida y comidas para llevar para los que tienen hambre y la gente sin techo, la distribución al aire libre de ropa y prendas de invierno, así como la coordinación de asistencia financiera y de alquiler. En todas nuestras oficinas regionales, la colaboración de Caridades Católicas y las parroquias ha asegurado que estemos fortaleciendo a las comunidades más necesitadas. Muchas personas han dado un paso adelante para sostenerse y fortalecerse mutuamente, a través de la oración, las donaciones, el servicio, y el seguimiento de las pautas de salud. También han ayudado con chequeos del bienestar de los ancianos o los que se encuentran aislados, la distribución de equipo de protección personal (PPE, por sus siglas en ingles), alentado sobre las vacunas y ayudado a programar citas de vacunación. Saldremos de esta pandemia, y al hacerlo, nuestra tarea compartida será no sólo proporcionar servicios, apoyo y esperanza a los más necesitados, sino presentarle la mejor versión de sí mismo a un mundo post pandémico que todavía va a necesitar tanta curación y amor. En 1918, el cardenal Mundelein dijo: "Hay fuerza en la unidad". Sus acertadas palabras siguen siendo válidas hoy en día. Lo invitamos a unirse a nuestra comunidad de cuidado participando en los ministerios sociales de su parroquia o uniéndose a nosotros en www.catholiccharities.net . Le agradecemos por ser el motor que impulsa tanto buen trabajo y esperamos con ansias todo lo que podamos lograr juntos. Terri Denny es Vicepresidenta de Servicios Regionales y Participación Parroquial.