Literalmente, “diácono” (del griego diakonos, y posteriormente del latín diaconus,) significa “servidor”. Si bien todos estamos llamados a servir en la misión de Cristo, la doctrina católica ha querido establecer una categoría de servicio que ha denominado “diácono”. Según el Catecismo de la Iglesia Católica, “los diáconos fungen como ministros ordenados para las tareas de servicio de la Iglesia, y aunque no reciben el sacerdocio ministerial (no son curas), se les confiere funciones importantes en el ministerio de la Palabra, del culto divino, de la dirección pastoral y del servicio de la caridad, tareas que deben cumplir bajo la autoridad pastoral de su obispo”. (CEC 1596). Es cierto que el diaconado es uno de los grados del ministerio sacerdotal, junto con el orden del presbiterado (presbíteros o sacerdotes) y el orden episcopal (obispos); sin embargo, el diaconado permanente es un ministerio que surge desde la Iglesia primitiva y que el Concilio Vaticano II ha restablecido como un grado propio y permanente que puede ser conferido a hombres casados y que enriquece la misión de la Iglesia, según explica el citado Catecismo de la Iglesia Católica. El programa de Diaconado Permanente que ofrece el Instituto de Liderazgo Pastoral es una propuesta que brinda un proceso de discernimiento y preparación para aquellos hombres de nuestra comunidad hispana que sienten el deseo de servir de una manera mucho más comprometida en la Iglesia y cumplen con los requisitos para ejercer este ministerio. Daniel Ramírez Flores, director adjunto del programa de formación diaconal del ILP, explica que este programa consta de una trayectoria formativa de cuatro años; el primer año corresponde al aspirantado y los tres años siguientes a la candidatura. Ramírez nos informa que entre los requisitos para participar en este programa están: ser varón mayor de 32 años, católico practicante, involucrado en algún ministerio de la comunidad parroquial; soltero o casado (si es casado, tener al menos 5 años de matrimonio por la Iglesia y recibir el consentimiento y el acompañamiento de su esposa) y la aprobación de su párroco. En caso de que el aspirante sea soltero o separado, es necesario que participe en una entrevista para determinar que no haya ninguna dificultad canónica. “Para mí este ministerio es una gracia de Dios” expresa Daniel Ramírez, quien agrega que se busca la formación de mente y corazón para servir en las necesidades más importantes de la comunidad. “A la vez, esto ha sido una ganancia para toda la comunidad, que ven a estos diáconos como modelos, como personas íntegras” dice Ramírez. “Ellos se convierten en un faro para la comunidad y son de gran ayuda a los párrocos, sobre todo en este tiempo en que su apoyo es fundamental”. Desde 2011, Nelly Lorenzo funge como directora del Instituto de Liderazgo Pastoral. Para ella, el ILP es una de las muestras del deseo que tiene la Arquidiócesis de Chicago de que sus líderes tengan una formación adecuada, de tal manera que puedan servir de frente a las necesidades de sus parroquias y trabajar en una pastoral de conjunto. “El ILP se dirige a los hombres y a las mujeres que quieren responder a su llamado bautismal, un llamado que responde al Señor para la construcción del Reino”, expresa Lorenzo, quien enfatiza que los candidatos reciben una preparación holística que cubre desde la formación humana, temas teológicos (como Revelación, Cristología y Espiritualidad) y pastorales, como Misión y Pastoral. “Para cubrir el coste de esta preparación, por lo general, se establece un acuerdo financiero entre el participante y el párroco” añade Lorenzo, “pero también hemos tenido el caso de que algunas parroquias asumen completamente esa responsabilidad”. Daniel Ramírez, agrega por su parte que en promedio cada año son ordenados de cinco a siete candidatos, la mayoría procedentes de México, Perú, Ecuador y Puerto Rico. A propósito, comenta que el próximo 8 de mayo del año en curso la iglesia de Chicago ordenará como diáconos permanentes a 11 candidatos egresados de ILP. La fecha límite para solicitar ingreso a este programa en su próximo ciclo es el 15 de julio de 2021. Las sesiones formativas iniciarán el 7 de septiembre. Por su parte, los interesados en recibir formación en los programas de Ministerio Laico y de Líderes Catequéticos pueden hacer sus solicitudes, pues ILP las está aceptando con límite del 13 de agosto. A la fecha, desde la fundación del ILP en 1984, alrededor de 1,600 hispanos de distintas diócesis han participado de los programas de formación que allí se ofrecen, para servir más y mejor en sus distintas comunidades de fe. Los programas del Instituto de Liderazgo Pastoral abarcan más que la preparación para el diaconado permanente, ya que cuenta con programas de formación para Ministerio Laico, Liderazgo Catequético, y Formación Continua. Ellos tienen sus oficinas en la Universidad Santa María de los Lagos, en Mundelein, IL., pero sus sesiones formativas se ofrecen además en distintas sedes parroquiales de la Arquidiócesis de Chicago, como el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, en Des Plaines y la Iglesia San Pablo, en Chicago Heights. Para inscripciones y mayores informes visite el sitio web www.usml.edu