Estados Unidos

Tras amenazas de redadas, líderes eclesiales apoyan a inmigrantes

Por Rhina Guidos (CNS)
lunes, julio 1, 2019

El obispo Mark J. Seitz de El Paso, Texas, habla con una niña hondureña, Cesia, mientras camina y reza con un grupo de migrantes en el Puente Internacional Lerdo en El Paso, el 27 de junio de 2019. Foto: José Luis González, Reuters/CNS

WASHINGTON (CNS) -- Las amenazas del presidente fueron y vinieron en tuits, pero les tocó a los sacerdotes, religiosos y religiosas, organizaciones afiliadas a la iglesia, e incluso a algunos obispos el tratar de aminorar el temor provocado dentro de comunidades de fe inmigrantes.

El presidente Donald Trump utilizó la plataforma Twitter el 17 de junio para anunciar que el departamento de Inmigración y Fronteras de los Estados Unidos, conocido como ICE, pronto detendría a “millones de extranjeros indocumentados que han entrado en el país sin documentación”. Unos días más tarde retiró la amenaza con otro tuit. Dijo que, a petición de los demócratas, retrasaría la acción por dos semanas para ver si podían llegar a un acuerdo sobre el asilo político. Si no llegan al acuerdo, “¡Comienzan las deportaciones!” dijo en un tuit el 22 de junio.

Pero para entonces, el pánico había comenzado en comunidades inmigrantes que se preparaban para las redadas contra familias listas para comenzar el 23 de junio, un domingo.

El párroco, padre Bruce Lewandowski, de Baltimore, dijo que se encontró una familia inmigrante en una camioneta en el estacionamiento de la iglesia al comienzo del día, y que habían dormido en el vehículo frente a la iglesia por miedo, dijeron varias agencias de noticias.

El obispo Joe S. Vazquez, de Austin, Texas, presidente del Comité de Migraciones para la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos, conocidos como USCCB, dijo en una declaración del 22 de junio que, aunque la conferencia reconoce el derecho de las naciones a controlar sus fronteras, las “amplias acciones de cumplimiento suscitan el pánico en nuestras comunidades, pero no servirán como disuasión eficaz para la migración irregular”.

“En su lugar, nos deberíamos centrar en las raíces de las causas que han empujado a tantos en Centroamérica a dejar sus hogares en búsqueda de la seguridad, y en la reforma de nuestro sistema migratorio con una perspectiva de justicia y el bien común. Estamos dispuestos a trabajar con la administración y el Congreso para alcanzar estos objetivos”, dijo.

“Durante este momento turbulento, ofrecemos nuestras oraciones en apoyo de nuestros hermanos y hermanas, sin importar su estatus migratorio y reconociendo su dignidad intrínseca como hijos de Dios”, continuó.