Estados Unidos

Dreamers y obispos de Estados Unidos reciben con júbilo el fallo en favor de DACA

Por Ariane Moya
miércoles, junio 24, 2020

Manifestantes en apoyo de DACA afuera de la Corte Suprema el 12 de noviembre de 2019. Foto: Jonathan Ernst, Reuters/ CNS

La decisión emitida el 18 de junio por la Corte Suprema de Estados Unidos, de que el presidente Donald Trump no tenía la autoridad para bloquear el programa de DACA, al no ofrecer una justificación adecuada, significó un respiro de alivio para Alfredo Alviar.

Alviar es un joven de la comunidad de Gage Park, miembro del grupo de jóvenes adultos Jeremías en la parroquia de San Gall. Su familia es originaria de Acapulco, Guerrero conocido como un foco de violencia en México. 

“Vine a los Estados Unidos con mi familia a los seis años” dice Alviar. “Hemos vivido en Chicago toda mi vida, aquí he estudiado y gracias a DACA estoy trabajando. Amo a Chicago. Mi familia dejó un lugar lleno de violencia donde no hay muchas oportunidades de empleo y el venir acá implicaba crecer unidos como familia”.

DACA es un programa para jóvenes traídos a Estados Unidos sin papeles cuando eran niños. Con este programa, los llamados dreamers tienen la oportunidad de trabajar en este país y tienen que renovar el permiso cada dos años. A través de este programa, los jóvenes también han podido obtener seguro de salud a través de los lugares donde son empleados.

Alviar dice que su meta es hacer algo mejor para la futura generación. “Mi hermana y yo estamos estudiando en la Universidad actualmente y también trabajando” agrega. “Ahora podemos hacer tantas cosas que antes no podíamos. DACA nos ha dado la oportunidad de ayudar a nuestra comunidad, pero también a nuestras familias”.

En comunidades latinas del sur de Chicago como La Villita, Pilsen, Brighton Park, Las Empacadoras y Gage Park muchos jóvenes han podido sacar adelante sus estudios gracias a DACA. Dicho programa les ha dado la oportunidad de trabajar para pagar sus planes académicos hasta llegar a la maestría e incluso doctorado. Durante estos tiempos difíciles del COVID-19 muchos padres de familias inmigrantes se han quedado sin empleo. Muchos de estos jóvenes han podido mantener sus empleos y ayudar monetariamente a sus familiares durante estos tiempos de crisis.

Actualmente, Alfredo Alviar estudia en Southern New Hampshire University y trabaja en una escuela. “Durante este proceso puedo ayudar a mi familia específicamente en estos momentos de coronavirus y con todo lo que estamos viviendo” dice.

“DACA ha tenido un impacto positivo en mi vida pues ha cambiado cómo me siento” afirma Alviar. “Antes de DACA el futuro se veía muy oscuro y era una realidad muy triste”.

Alviar dijo que la decisión de la Suprema Corte le ha dado mucha alegría, pero esto no significa que el problema esté solucionado. “No sé cuáles serán los próximos pasos” dice, “ya que se puede introducir a la Corte Suprema nuevamente. Hay familias que no tienen trabajo y las personas que tienen DACA se apoyan unos a otros, pero también tenemos que pensar en el futuro. Gracias a DACA tenemos más negocios, enfermeras, y doctores, lo que es un impacto positivo para la comunidad”.

La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos ha manifestado su rechazo a la intención del presidente Trump de terminar DACA. El 4 de octubre del 2019 los obispos presentaron una declaración amicus curiae para apoyar y mantener el programa. El arzobispo José H. Gómez y el obispo Mario E. Dorsonville expresaron su opinión sobre la resolución de la Corte Suprema en una declaración publicada el mismo 18 de junio.

“Recibimos con agrado la decisión de la Corte Suprema de los Estados Unidos que señala que la Administración Trump no siguió los procedimientos administrativos necesarios para derogar el programa DACA” se lee en dicho documento.
“Nosotros seguiremos acompañándolos a ustedes y a sus familias” dicen los obispos a los jóvenes de DACA. “Ustedes son una parte vital de nuestra Iglesia y nuestra comunidad de fe. Estamos con ustedes”.

El documento cita las palabras del Evangelio: “Si alguien que tiene medios mundanos ve a un hermano necesitado y rechaza su compasión, ¿cómo puede permanecer el amor de Dios en él? (1 Juan 3:17)”.

“Por último, alentamos encarecidamente a nuestros senadores de Estados Unidos a que aprueben de inmediato una legislación que brinde un camino a la ciudadanía para los Soñadores (Dreamers)” concluye el documento.