Área de Chicago

El Arzobispo Cupich se suma a los esfuerzos en la comunidad de Austin para promover la paz en el vecindario

Por Joyce Duriga/CNW
jueves, junio 2, 2016

El vecindario de Austin en la Ciudad de Chicago encabeza una lista en la cual sus residentes preferirían no estar. “Para el 25 de abril, la comunidad de Austin –nuestra comunidad, nuestra comunidad inmediata– encabezaba (la lista de violencia en) Chicago con 23 homicidios y 101 personas heridas de bala. Esto es una locura, esto está mal”, afirmó el padre Tom Walsh, párroco de la parroquia San Martín de Porres a los feligreses reunidos en la Misa celebrada el pasado 1 de mayo por el Arzobispo Cupich.

De acuerdo con el Chicago Tribune, para el 2 de mayo de 2016, 1,135 personas habían sido baleadas en Chicago.
“La verdad de las cosas es que, una persona es herida de bala cada dos horas y media en Chicago. Por desgracia, si esas estadísticas funcionan así, eso podría estar sucediendo mientras estamos aquí esta mañana”, explicó el sacerdote.

La parroquia se encuentra a unas nueve millas al oeste del centro de Chicago.
Cuatro de las cinco principales comunidades que han experimentado la mayor violencia este año se encuentran a poca distancia de esta iglesia en la zona oeste, acotó el Padre Walsh.

“Es por eso que nosotros como iglesia – recordemos que este es el templo más alto de toda esta comunidad, por no decir que es uno de los templos más altos en la ciudad de Chicago – necesitamos seguir siendo un faro de luz y de esperanza para nuestro mundo”, expresó el Padre Walsh a la congregación al final de la misa.
Inmediatamente después de la misa, la congregación salió a la calle frente a la iglesia y levantaron pancartas en dirección a los automovilistas que decían “Toca la bocina por Jesus”, “Orar cambia las cosas”, y “Unidad en la comunidad”.

No es la primera vez que la comunidad de la iglesia sale a las calles para manifestarse por la paz pero sí fue la primera vez que el Arzobispo Cupich visitó la iglesia, celebró la misa con ellos y ofreció apoyo a sus esfuerzos. La parroquia realiza varios programas para ayudar al vecindario, incluido un programa extracurricular por la paz que proporciona a los jóvenes un lugar donde ir.
Durante el verano, los feligreses salen a las calles para orar por su comunidad.
“La Iglesia católica aquí en los condados de Cook y Lake se preocupa muchísimo por el tema de la violencia y la creciente ola de violencia armada”, afirmó el Arzobispo Cupich a la congregación al terminar la misa. “No podemos hacer todo pero podemos hacer algo”.

El arzobispo comentó que recientemente envió una carta a los párrocos de la ciudad animándoles a participar en el programa de empleo juvenil One Summer Chicago, patrocinado por la ciudad. A través del programa las parroquias e iglesias podrían ofrecer empleos de verano para adolescentes y hacer que sea subsidiado por la ciudad.
“Parte del problema, además de la disponibilidad de armas de fuego, es la falta de esperanza en los corazones de los jóvenes”, explicó el arzobispo. “Tenemos que hacer algo para darles esperanza y brindarles oportunidades”.
Janette Peterson-Gruszeczki está de acuerdo.

“Nuestros hijos están muriendo y la gente está muriendo sin motivo alguno, por lo que queremos que la gente sepa que nos importa lo que está pasando en nuestra comunidad”, dijo.
La comunidad está dispuesta a tomar cartas en el asunto porque sus miembros están cansados de ver a las personas morir “sin motivo alguno”, comentó.

“Soy maestra en la Escuela St. Angela y escucho lo que dicen mis hijos y tienen miedo”, agregó. “Ellos no salen a jugar porque tienen miedo de que algo les vaya a ocurrir. Ya es hora de ponerle fin y de que las personas se den cuenta de que estamos matando a nuestro pueblo, a nuestra nación”.

Tiffany Rodríguez, una feligrés, madre y oficial de la policía de Chicago, tiene la misma sensación.
“Yo trabajo en esta área como oficial de policía y se está poniendo cada vez peor. Hay una gran cantidad de violencia y los niños están muriendo por actos sin sentido”, dijo. “Va más allá de que la policía esté involucrada. La comunidad debe salir en medio de sus hijos y promover la unidad”.

Advertising