Área de Chicago

El Proyecto de Paz Parroquial involucra a Jóvenes con sus comunidades

Por J. Pablo Padilla
domingo, enero 31, 2016

El fin de semana del 22 de enero, aproximadamente treinta y cinco jóvenes de varios barrios del suroeste de la ciudad de Chicago participaron en un retiro con el propósito de planear la manera de sanar sus comunidades. Los participantes llegaron de Back of the Yards, Gage Park, West Lawn, y de las parroquias Santa Rita de Casia, Santa Clara de Monte Falcó, San José y San Gall. La mayoría de los jóvenes que llegaron no son los jóvenes que comúnmente vemos en las parroquias los domingos durante la misa o jóvenes que están activos en algún ministerio. Para muchos de ellos, esta fue la primera experiencia de retiro.

Los jóvenes que llegaron fueron invitados personalmente por otros jóvenes que ya han estado activos con el Proyecto de Paz Parroquial (Parish Peace Project). Este proyecto nació de una conversación que tuvieron Fernando Rayas y el padre Gary Graf hace ya casi dos años. La idea en aquel entonces era buscar una manera de confrontar la realidad de la violencia que se vive en las comunidades y barrios en los alrededores de las parroquias en Chicago. En particular en los barrios latinos donde muchos jóvenes son víctimas de actos de violencia intencionada o accidental. En sus inicios el proyecto buscó el apoyo de sacerdotes y gracias a Dios los sacerdotes de las parroquias que mencionamos se ofrecieron como protagonistas de la iniciativa.

El Proyecto de Paz Parroquial ha iniciado como piloto en esta área, y si funciona la idea es que se lleve a otras áreas similares en la arquidiócesis. Por ahora, los jóvenes que participaron concluyeron el retiro con entusiasmo y ganas de trabajar.

Durante el retiro, trabajamos el Modelo de Profetas de Esperanza del Instituto Fe y Vida. El modelo consiste en el Ser, Ver, Juzgar, Actuar, Evaluar y Celebrar. Nos enfocamos en la persona y su historia, sus talentos y dones, sueños, desafíos y esperanzas.

Vimos después la realidad de las comunidades en donde viven los jóvenes a la luz de sus experiencias de vida en las diversas comunidades. Analizamos nuestros dones y desafíos a nivel social y cultural en el mundo del joven y en pequeños grupos dialogamos como nuestros talentos y dones puede ser el punto de partida para sanar nuestras comunidades. Las herramientas que se ocuparán para esta labor, según los jóvenes, son el amor, oración y conocimiento profundo de nuestra fe, y sobre todo perder el miedo a encontrarnos con la otra persona.

Antes de dar conclusión al retiro, los jóvenes desarrollaron un plan de acción pastoral para sus comunidades a través de las parroquias ya mencionadas, y las conclusiones fueron concretas y factibles. Para culminar evaluamos nuestra experiencia de retiro y celebramos la Santa Eucaristía donde los jóvenes fueron enviados a trabajar por la construcción del Reino de Dios.

La experiencia que se vivimos en el retiro está diseñada para ser una metodología experiencial, esto implica que el trabajo pastoral se aprende haciendo con los y las jóvenes. Los próximos pasos a seguir para los jóvenes que participaron del retiro es de regresar a sus comunidades y parroquias e invitar a jóvenes para que vivan la misma experiencia a nivel comunidad o parroquia especifica. Es una labor que los jóvenes que nos acompañaron al retiro están más que dispuestos para iniciar y lanzar. Para asegurar que el trabajo tenga seguimiento, la Pastoral Juvenil a través del Ministerio de Jóvenes Adultos, acompañará de cerca el proceso.

Quisiera agradecer de todo corazón a la mesa directiva del Proyecto de Paz Parroquial por su dedicación y esfuerzo en traer la paz al mundo de una manera tan concreta. ¡Gracias!

Advertising